El mercado inmobiliario en nuestro país está de enhorabuena. Hasta la fecha suman siete los meses consecutivos de recuperación económica, algo que no sucedía desde que comenzó la crisis en 2008. Aunque la recuperación está siendo lenta y paulatina. El Instituto Nacional de Estadística (INE) asegura en un informe correspondiente a Marzo de 2015 que el avance en la compraventa de viviendas es cada vez mayor, pero advierte que debemos ir con pies de plomo para no cometer los errores del pasado.
Si es que solo en el mes de marzo de este año se han registrado más de 27.000 compraventas de inmuebles, un 2,1% más que en marzo de 2014. Aunque el incremento de estas operaciones se produjo en febrero con un incremento del 15% respecto al mismo mes del año pasado. Esta alza del sector del ladrillo supone un 9% más en el primer trimestre de 2015 si lo comparamos con 2014.
La recuperación es una realidad pero no podemos olvidar que será muy lenta, ya que las consecuencias de la burbuja inmobiliaria siguen latentes en nuestra economía.
En el caso de la demanda, la ventas de pisos usados se han incrementado en los tres primeros meses del año, gracias al programa puesto en marcha por el Banco Central Europeo con el que el grado de esfuerzo a realizar por los hogares para comprar una casa se sitúe en “cotas sostenibles”. Sin embargo, la compraventa de viviendas nuevas han descendido con respecto a 2014. El que exista todavía un elevado número de viviendas sin vender ni alquilar en algunas regiones es una de las causas de la ralentización en la recuperación económica del sector.
Comunidad Valenciana y Baleares han sido líderes en el mes de marzo con el mayor número de compraventas de inmuebles por cada 100,000 habitantes, aún así, en términos absolutos, Andalucía sigue siendo la primera en el ranking con más de 5.000 operaciones. En valores relativos, las regiones donde más ha aumentado la compraventa de viviendas en tasa interanual fueron Asturias (+39%), Galicia (+18,3%) y Castilla y León (+13,6%), mientras que los mayores descensos correspondieron a Baleares (-21%), La Rioja (-20%) y Extremadura (-18,8%).