Hace unos días nos visitó un antiguo cliente andaluz quien presentaba un aspecto fatigado porque según nos contó, había heredado varias propiedades pertenecientes a su abuela, recientemente fallecida, y que no tenía liquidez para lo que se le venía encima.
Y es que cuando hablamos de herencia lo primero que se nos pasa por la cabeza es: ¡Nos ha tocado la lotería! Pero en cuanto ponemos un pie en la tierra, comprobamos que ‘no es oro todo lo que reluce’. Nuestro cliente se ha visto con la exigencia de hacer un pago que no sabía que existía, el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones obligatorio en la Comunidad Autónoma de Andalucía.
En España existen regiones en las que si algún individuo o colectividad recibe una herencia o una donación se les impone el pago del total neto de la adquisición. Este es el caso de nuestro cliente andaluz, ya que en su Comunidad Autónoma está en vigor este impuesto, siendo junto con Galicia, Asturias, Extremadura y Baleares las regiones españolas donde sale más caro al beneficiario obtener una donación o una herencia.
Imagine el agobio de nuestro cliente al descubrir que tenía que hacer un pago por haber heredado en su peor momento económico. Tal fue su desesperación que no dudó en acudir de nuevo a nosotros. Estudiamos su caso y nos encontramos con otro punto más, la herencia era compartida con sus primos, siendo propietario éste solo del 25% de los inmuebles adquiridos. Por lo que le aconsejamos nuestro servicio de Préstamo con Proindiviso, ya que al ser una herencia compartida no puede hacer gestión del total de ésta él solo. No pudiendo vender siquiera la parte que le corresponde, pues los demás propietarios se negaron a realizar venta alguna y a comprarle la suya.
Al solicitar el Prestamo con Proindiviso nuestro cliente percibe hasta el 50% del valor de la tasación de la parte que le corresponde de la herencia, pudiendo de esta manera hacer frente al Impuesto de Sucesiones y Donaciones que exige la Junta de Andalucía sin tener que negociar con los demás herederos, quienes tienen cada uno una situación económica diferente a la de nuestro cliente.
Ya más tranquilo, el heredero nos llama cada dos semanas para que le orientemos en cuanto a qué hará en un futuro con los inmuebles de su abuela. Ánimo amigo que aquí estamos para lo que necesites.
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