Esto es un caso muy frecuente de algunos clientes que se acercan a nosotros buscando una solución rápida: ¿Cómo soluciono mi deuda con las tarjetas de crédito? La realidad es que cuando nos encontramos ante una deuda de este tipo existen varias opciones o pasos que recomendamos seguir:
Revisa tus cuentas
El mejor comienzo para empezar a solucionar tus deudas es mediante un plan de pagos que puedes hacer tú mismo.
Dejar de usar tarjetas que permiten crédito
Al no pagar, las entidades te cobran los llamados intereses de demora que por lo general son bastante altos. Seguramente también tendrás que hacer frente a comisiones por la reclamación de recibos impagados (unos 30 euros de media). Aunque todo esto dependerá del contrato que tengas con la entidad.
Control de gasto y búsqueda de ingresos
El organizar tu presupuesto de forma periódica y evitar cualquier gasto innecesario son dos premisas para organizar tu plan de deudas. Cualquier fuente extra de ingresos puede ayudarte a aliviar la situación, siempre partiendo de un control del gasto (algo que se escucha mucho últimamente en tiempos de crisis).
Dirigirse a la entidad financiera
Si ves que no es posible por tu parte hacer frente a la deuda lo que recomendamos es dirigirse directamente a la entidad financiera e intentar buscar una solución mostrando la intención y voluntad de pagar. La negociación con el banco o entidad puede proporcionarte varias soluciones para hacer frente a la misma deuda ya que ellos estarán interesados en cobrar. Desde Servicios Financieros Gold actuamos como intermediario con los bancos y tenemos experiencia en diferentes soluciones:
- Negociar. Aquí la opción principal es conseguir más tiempo presentado un plan de pagos realista e intentando justificar la situación como transitoria.
- Reagrupar la deuda. Otras opciones cuando la negociación no funciona son la reagrupación de la deuda o pedir un préstamo personal o préstamo con garantía hipotecaria. Al final con cualquiera de estas opciones lo que se busca es agrupar el préstamo y las tarjetas en un crédito con una única cuota que pueda además reducir la cuota alargando el plazo de pago. Hay dos opciones principales para conseguir esto: a través de los bancos o con capital privado. Desde SFG podemos ayudarte con cualquiera de estas opciones y si decides hacerlo con otra entidad te recomendamos que su actividad esté regulada por el Banco de España para evitar malas experiencias.
El camino más corto es solucionarlo con la entidad particular donde se tenga la deuda pero eso no es nada fácil en la mayoría de los casos. En el caso de que te encuentres en una lista de morosos se hará más complicado aún conseguir un acuerdo con un banco. En SFG trabajamos como intermediarios sin importar ASNEF u otras listas de morosos y tenemos una larga experiencia en casos de este tipo que suelen solucionarse al reunificar la deuda en un préstamo personal que permitirá hacer frente a lo que se adeuda en un plazo de tiempo más largo y con un tipo de interés más bajo que el aplicable al aplazar el pago de la tarjeta.
- Bloqueo de tarjeta
- Intereses y comisiones: se acumulan los intereses y comisiones a medida que pasa el tiempo sin hacer frente a la deuda
- Inclusión en listados de morosidad: el deudor es incluido en ficheros de morosidad, como RAI, ASNEF o EQUIFAX, a partir de los 90 días desde que se produjo el impago. Al encontrarte en una de estas listas las entidades de crédito que comparten dicha información no accederán a negociar ningún producto financiero. (Nosotros sí, de hecho tenemos un préstamo con ASNEF adecuado para personas en dicha situación).
- Embargo de bienes: podrían embargarle los bienes (sueldo, cuentas, vivienda, coche, etc) para hacer frente a la deuda.
- Costes Judiciales: si la deuda se alarga puede que la entidad decida acudir a la justicia y se añadirían los costes judiciales a la deuda.
Soluciona tus deudas con las tarjetas ahora
Si te encuentras con deudas de tarjeta de crédito actualmente y quieres contar con nosotros puedes enviarnos tu solicitud y estudiaremos tu caso de forma gratuita sin ningún compromiso.
